La temporada 2 de Peacemaker sigue consolidándose como una de las apuestas más imprevisibles del universo DC en televisión. Si la primera entrega giraba en torno a la invasión alienígena de las mariposas y la dinámica de un equipo que, a la fuerza, debía trabajar unido, ahora el tono es diferente, cada personaje atraviesa una crisis personal mientras Chris Smith (John Cena) se enfrenta a un problema que lo supera por completo, el multiverso.
El episodio 2, titulado Un Hombre es Solo tan Bueno Como su Pájaro (A Man Is Only As Good As His Bird) , arranca de inmediato tras los sucesos del capítulo estreno, con Chris lidiando con las consecuencias de haber matado a uno de sus doppelgängers. Desde ese punto, la trama se despliega en múltiples frentes: la culpa y las malas decisiones de Chris, las fracturas emocionales de Adebayo, Harcourt y Economos, el ascenso de Rick Flag Sr. en ARGUS y, como si fuera poco, un protagonismo inesperado para Eagly, que finalmente demuestra ser mucho más que un alivio cómico.
Lo interesante es que Peacemaker logra equilibrar lo absurdo y lo trágico. El multiverso se presenta con toques de sátira –Chris borracho texteando a la Harcourt de otra realidad– pero también como metáfora de sus deseos incumplidos y de la imposibilidad de aceptar quién es. A la vez, la serie no descuida al resto del elenco, que atraviesa arcos individuales cargados de frustración, soledad y fracaso. Todo esto ocurre en paralelo a la venganza en marcha de Rick Flag Sr., quien convierte la temporada en un enfrentamiento inevitable entre pasado, presente y futuros alternativos.

Peacemaker temporada 2: Chris Smith y el dilema del multiverso
El episodio 2 de la temporada 2 de Peacemaker comienza con Chris intentando deshacerse del cadáver de su doble. Para ello recurre a su mejor y más inestable aliado, Adrian Chase (Freddie Stroma). La secuencia mezcla humor grotesco y camaradería torpe, mostrando cómo ambos intentan ocultar el cuerpo dentro del Quantum Unfolding Storage Unit. Este dispositivo, capaz de conectar 99 universos distintos, se convierte rápidamente en el centro de la narrativa.
Pero lo que podría haber quedado en un simple accidente se transforma en obsesión. Chris descubre que su otra versión tenía una vida más plena: en ese mundo alternativo mantenía una relación con Harcourt. Esa revelación desata en él un espiral de malas decisiones. Primero guarda el celular del doppelgänger, luego regresa al universo paralelo para enviar mensajes impulsivos y finalmente se deja arrastrar por la fantasía de vivir una vida ajena.
Aunque Adebayo intenta frenarlo –aconsejándole hablar con ARGUS y protegerse–, Chris se niega. Su negativa a escuchar no solo lo aísla más, sino que lo pinta como un hombre en crisis, alguien que, pese a haber demostrado cierta madurez en la temporada anterior, sigue siendo incapaz de asumir su realidad. El multiverso funciona entonces como un espejo incómodo de sus inseguridades y un recordatorio de que, aunque intente reinventarse, sigue cargando con errores que no logra superar.

El derrumbe emocional de Adebayo, Harcourt y Economos
Uno de los rasgos más potentes de Peacemaker es su coralidad, característica inseparable del estilo de James Gunn, quien ha hecho de los elencos colectivos –de Guardianes de la Galaxia a Superman– una de sus marcas narrativas más reconocibles. Aunque Chris sea el protagonista, la serie siempre ha brillado al explorar cómo los demás personajes chocan entre sí y con sus propias limitaciones. En este episodio, esas fracturas son más evidentes que nunca.
Adebayo atraviesa el duelo de su matrimonio con Keeya, quien finalmente admite que la relación terminó. Este quiebre deja a Adebayo en un estado de vulnerabilidad que contrasta con la seguridad con la que se mostró en la primera temporada. Harcourt, por su parte, no logra encontrar un trabajo ni escapar de la violencia que parece acompañarla a donde vaya: incluso es confrontada por una mujer que interpreta sus heridas como señales de abuso.
Economos, aunque ahora trabaja formalmente para ARGUS, confiesa que detesta su empleo. Su descontento aumenta con la llegada de Fleury (Tim Meadows), un colega insoportable que lo incomoda con su verborrea y su falta de tacto. Así, cada uno de los personajes está en un punto bajo, y eso abre espacio para arcos de redención o, en algunos casos, para caídas aún más profundas.
La excepción es Adrian, quien paradójicamente encuentra en Chris un propósito. Aunque al inicio se resiente por no haber sido invitado a una fiesta, termina siendo el único confidente de Chris en relación al multiverso. Su lealtad, tan absurda como entrañable, lo convierte en el ancla emocional más estable del protagonista, incluso cuando ambos están cubiertos de sangre y mentiras.
El regreso del equipo en Peacemaker: Humor, nostalgia y conflicto
En medio de este panorama sombrío, el episodio 2 de la temporada 2 de Peacemaker ofrece un respiro con la fiesta de bienvenida de Economos. Allí se produce el primer reencuentro real del grupo desde el inicio de la temporada. La escena está cargada de humor, baile y chistes internos, recordando al espectador la dinámica caótica y entrañable que definió la primera entrega.
Sin embargo, incluso en la celebración surgen las tensiones. Chris y Harcourt discuten sobre su tendencia a meterse en peleas, revelando que su vínculo sigue marcado por el choque de personalidades y la incapacidad de comunicarse. Aunque la escena no hace avanzar demasiado la trama, sí cumple un rol fundamental: recordarle al espectador que, pese a las diferencias, el corazón de la serie sigue siendo ese grupo de inadaptados que, cuando se junta, genera momentos de energía única.

Rick Flag Sr. en ARGUS: Venganza y tensión política en Peacemaker
Tras la caída de Amanda Waller, Rick Flag Sr. (Frank Grillo) asume el mando de ARGUS con un objetivo definido, vengar la muerte de su hijo, ocurrida en The Suicide Squad. Su primera medida es solicitar acceso a los archivos clasificados de aquella misión y colocar a Chris bajo una estricta vigilancia. El episodio incluso recupera escenas de la película para mostrar cómo Peacemaker asesinó a Rick Flag Jr. en su enfrentamiento por un disco duro con secretos comprometedores.
Sin embargo, James Gunn aclara que estas imágenes no canonizan toda la película dentro del nuevo DCU. Solo los fragmentos utilizados en pantalla –como la muerte de Flag Jr.– forman parte de esta continuidad. Ni Starro, ni la lista completa de la Task Force X, ni siquiera el famoso disparo de Bloodsport con una bala de kriptonita contra Superman están confirmados como hechos de este universo.
Este enfoque selectivo permite a Gunn rescatar momentos clave del pasado que potencian la historia actual, mientras evita arrastrar inconsistencias narrativas del DCEU. Así, el liderazgo de Flag Sr. no solo añade una capa de tensión política y personal a la temporada, sino que también redefine el vínculo de ARGUS con Chris y sus aliados, al punto de desatar un enfrentamiento directo con uno de los personajes más queridos (y temidos) de la serie: Eagly.
Eagly, héroe inesperado del episodio 2 de la temporada 2 de Peacemaker
El momento más sorprendente y memorable del episodio 2 llega cuando un equipo de agentes de ARGUS irrumpe en la casa de Chris para reuisarla. Allí se encuentran con Eagly, el águila que ha acompañado a Chris desde el inicio. Lo que parecía una simple mascota se convierte en un depredador implacable, Eagly ataca con furia a los intrusos, dejándolos fuera de combate en una secuencia tan violenta como cómica.
El detalle es que Fleury, incapaz de “ver” el peligro debido a lo que describe como “ceguera aviar”, se convierte en víctima fácil. La escena no solo ofrece comedia física y gore estilizado, sino que reivindica a Eagly como un personaje esencial de la narrativa. Lejos de ser un accesorio, el águila demuestra que puede defender a Chris mejor que cualquier aliado humano.
Este giro refuerza la idea central del episodio 2: el título Un Hombre es Solo tan Bueno Como su Pájaro no es una broma, sino una declaración. Chris, rodeado de enemigos y traiciones, encuentra en Eagly la única lealtad absoluta.

Qué significa el futuro multiversal para Peacemaker y su equipo
Con todos estos elementos, el episodio 2 de la temporada 2 de Peacemaker deja en evidencia las tensiones que atraviesan la serie. La trama del multiverso se complica, Rick Flag Sr. avanza desde ARGUS y los personajes secundarios siguen hundidos en crisis personales. Incluso Eagly, convertido en héroe inesperado, aparece como el único sostén leal en medio del caos.
Pero más allá de la ficción, lo que resulta más engorroso es el capricho de James Gunn: insiste en mantener a Peacemaker como parte del canon del DCU, seleccionando escenas como “válidas” mientras descarta películas enteras o incluso tramos completos de la temporada anterior. Esa lógica fragmentaria obliga al espectador a asumir reglas arbitrarias que cambian según convenga.
Al mismo tiempo, Gunn se muestra empecinado en incluir desnudos y excesos bajo el disfraz de lo políticamente incorrecto. Lo realmente contradictorio es presentar un Superman PG-13 pensado para todo público y, al mismo tiempo, promocionar Peacemaker como serie esencial del nuevo DCU mientras en pantalla se suceden orgías, consumo de cocaína y sangre a raudales. El resultado es un híbrido extraño que se queda a medio camino entre sátira autoconsciente y ejercicio de poder autoral, donde la coherencia narrativa parece importar menos que la provocación.
DISPONIBLE EN HBO MAX.
 
				 
								


