El Eternauta, una de las grandes sorpresas de Netflix en 2025, no solo se convirtió en un fenómeno internacional con una segunda temporada confirmada, sino también en el centro de una polémica sobre el uso de inteligencia artificial en la producción audiovisual. Ted Sarandos, co-CEO de la plataforma, admitió que una escena de colapso de edificio en Buenos Aires fue realizada íntegramente con herramientas de IA generativa.
La revelación es significativa no solo por tratarse de una serie basada en un cómic tan icónico como el de Héctor Germán Oesterheld y Francisco Solano López, sino por la magnitud del logro técnico. Según Sarandos, la escena se completó “diez veces más rápido” que con los métodos tradicionales y, además, a un costo mucho menor, lo que la vuelve “inviable” sin la ayuda de la IA, especialmente dentro de un presupuesto acotado como el que tuvo la serie.
El anuncio de la utilización de IA en El Eternauta reaviva el debate que divide a la industria del entretenimiento: ¿la inteligencia artificial es una herramienta útil o una amenaza al trabajo creativo? Mientras Netflix la presenta como una solución para hacer contenido de calidad a menor costo, otros sectores alertan sobre las consecuencias laborales y artísticas que esta tecnología podría implicar.

¿Revolución o riesgo? Lo que implica usar IA en la producción audiovisual
La inclusión de inteligencia artificial en el proceso creativo ha generado reacciones encontradas. Algunos espectadores parecen indiferentes siempre y cuando el producto final sea sólido; sin embargo, muchos profesionales del cine y la televisión advierten que el uso intensivo de IA podría llevar a una pérdida de identidad artística y de puestos de trabajo.
Las herramientas de IA generativa, si bien avanzadas, aún no logran replicar las imperfecciones intencionadas, los matices humanos y la sensibilidad que aporta el trabajo artesanal de los artistas de efectos visuales. La escena en cuestión fue bien recibida por el público, pero la inquietud persiste: si hoy se aplica a una secuencia, ¿qué impide que en el futuro se use para reemplazar equipos enteros?
Sarandos insiste en que estas decisiones son necesarias para la sostenibilidad de los proyectos: “el costo simplemente no habría sido viable con métodos tradicionales”, sostuvo. Su visión, en definitiva, sugiere que el uso de IA será cada vez más habitual en los procesos productivos de la industria.

El Eternauta marca un precedente para Latinoamérica y para el futuro del streaming
Más allá del uso de IA, El Eternauta ya es un hito para las producciones latinoamericanas en plataformas globales. Con Ricardo Darín como Juan Salvo y un enfoque postapocalíptico adaptado al contexto argentino, la serie logró capturar tanto a la crítica como al público, acumulando un impresionante 96% de aprobación en Rotten Tomatoes.
La decisión de Netflix de aplicar inteligencia artificial en una producción argentina indica que esta tecnología no estará reservada únicamente a megaproducciones estadounidenses. En cambio, comienza a integrarse incluso en mercados regionales donde los presupuestos son más ajustados y los márgenes de rentabilidad, más estrechos.
Esto podría abrir nuevas oportunidades para contar historias ambiciosas sin depender exclusivamente de grandes recursos técnicos. Pero también obliga a replantear cómo se protegerán los derechos laborales y creativos en este nuevo paradigma de producción. Las preocupaciones sobre la forma en que se entrenan los modelos de IA, y si se están utilizando obras originales sin consentimiento, siguen sin resolverse.
Por ahora, El Eternauta parece ser solo el primer paso de un proceso que recién comienza. Su éxito, combinado con decisiones técnicas innovadoras (y polémicas), lo convierte en un caso testigo de cómo las plataformas podrían transformar la forma de hacer televisión en los próximos años.
 
				 
								


