La escena postcréditos de Depredador: Cazador de Asesinos (Killers of Killers), la reciente entrega animada de la franquicia estrenada en Disney+, reorganiza el tablero narrativo del universo Depredador. Lo hace con una maniobra inesperada: la aparición de Naru, protagonista de Prey (2022), en estado de criogenización dentro de una nave yautja.
Cómo la escena post créditos de Cazador de Asesinos conecta con la película Depredador original
Con este gesto, el director Dan Trachtenberg retoma hilos dispersos del pasado de la saga y deja planteada una hipótesis de peso: que Dutch, el personaje encarnado por Arnold Schwarzenegger en el film original de 1987, podría ser uno más entre los “campeones” conservados para un nuevo ciclo de enfrentamientos. La decisión narrativa no sólo funciona como continuación, sino como relectura del propio archivo mitológico de la franquicia.
Cazador de Asesinos propone un enfoque antológico, centrado en tres humanos de épocas distintas que deben enfrentarse a un mismo guerrero yautja. Pero es el epílogo lo que le otorga al relato una dimensión inesperada. En diálogo con Polygon, Trachtenberg confirma que esa escena formaba parte del diseño inicial de la película, concebida bajo el nombre clave Warehouse. El director explica que la idea era emular el cierre de En Busca del Arca Perdida (1981), en el que un objeto sagrado queda resguardado en un depósito estatal. Aquí, el equivalente es una colección de combatientes –de distintas culturas, tiempos y orígenes– que podrían volver a la acción.
Depredador: Cazador de Asesinos | La estrategia de la criogenización
El uso de la criogenización como recurso narrativo de Cazador de Asesinos permite a la saga lo que las secuelas anteriores no lograron: unificar líneas argumentales dispersas sin recurrir al reboot. Dutch, Naru, e incluso personajes menores, pueden coexistir dentro de un mismo dispositivo temporal. No es casual que el descubrimiento de la pistola de chispa –vinculada a Prey y vista antes en Depredador 2– funcione como bisagra entre estas capas del canon. La saga, que durante años osciló entre reinicios fallidos y crossovers sin dirección, encuentra en este recurso una forma de reorganizar su mitología sin cancelarla.
Trachtenberg, responsable también de Prey, confirma que Cazador de Asesinos y Depredador: Badlands –prevista para noviembre de 2025– fueron concebidas como películas complementarias. Ambas buscan recuperar lo mejor de la franquicia original mientras proponen nuevas formas de exploración estética. En este caso, la animación no es solo un cambio de formato, sino una forma de habilitar otros tipos de acción, de violencia y de construcción visual. Esa libertad formal le permite a la película experimentar con líneas temporales, estilos narrativos y referencias cruzadas.
El gesto de congelar a los guerreros en espera de una reactivación también plantea una lectura sobre la condición del héroe en el cine de acción contemporáneo. Dutch, convertido en figura mítica, ya no pertenece solo a una película sino a un archivo simbólico, activable en función de las necesidades narrativas del presente. Es un cambio de régimen: de personaje a signo, de historia a recurso.
Depredador: Cazador de Asesinos | Entre la nostalgia y el reposicionamiento de franquicia
La posibilidad del regreso de Schwarzenegger a la saga no es un dato menor. Desde hace décadas, su personaje funciona como símbolo fundacional del universo Depredador. Su ausencia en secuelas anteriores marcó una distancia respecto del núcleo original. Pero ahora, al ser incluido como posibilidad en una estructura narrativa que no lo niega ni lo reemplaza, la franquicia logra un equilibrio distinto: reconocer el pasado sin quedar atrapada en él.
En este punto, el universo Depredador se acerca a estrategias vistas en otras franquicias longevas como Star Wars o Jurassic Park, donde los personajes clásicos son reintroducidos como figuras de transición, capaces de sostener el vínculo con el canon pero sin acaparar el centro. La construcción de Naru como nueva protagonista responde a esta lógica: no es una reemplazante de Dutch, sino una heredera que puede ocupar otro lugar dentro del mismo sistema narrativo. El hecho de que ella también esté congelada sugiere que no se trata de elegir entre pasado y futuro, sino de diseñar un presente que los contenga.
En términos de recepción, Cazador de Asesinos ya supera a Prey en puntajes críticos, con un 97% de aprobación en sitios especializados. Ese dato refleja no solo la efectividad del producto, sino también la vigencia del interés por la saga. Incluso figuras asociadas al original, como Bill Duke y Jesse Ventura, elogiaron el trabajo de Amber Midthunder en su rol como Naru, lo que señala una validación interna del traspaso generacional.
Por ahora, no hay confirmación oficial sobre la vuelta de Schwarzenegger, pero su presencia en el imaginario ya está instalada. Lo que está en juego no es tanto su participación concreta, sino la reconfiguración de un universo narrativo que lo reconoce como centro simbólico. En un cine cada vez más dependiente de franquicias sostenidas en personajes-ícono, la estrategia de Cazador de Asesinos permite activar esa figura sin someterla a la sobreexposición.
DISPONIBLE EN DISNEY+.
