Tras años de desarrollo y una salida frustrada de Netflix, Animal Farm (Rebelión en la Granja) llega finalmente a la pantalla. El proyecto, dirigido por Andy Serkis, se estrenará en junio en el Festival Internacional de Cine de Animación de Annecy, uno de los eventos más importantes del circuito. La película, basada en la novela de George Orwell publicada en 1945, transforma la alegoría política original en una propuesta animada con un tono más accesible. El objetivo: llegar a una audiencia amplia sin perder de vista la potencia de sus personajes ni la estructura simbólica del relato.
El elenco de voces es uno de los principales atractivos. Seth Rogen interpreta al cerdo Napoleón, figura central de la historia y claro paralelismo con el ascenso del totalitarismo. Lo acompañan Kieran Culkin, Gaten Matarazzo, Glenn Close, Steve Buscemi, Woody Harrelson, Jim Parsons, Kathleen Turner, Laverne Cox, Iman Vellani y el propio Serkis. El guion actual es obra de Nicholas Stoller, luego de un borrador anterior escrito por Serkis junto a Rupert Wyatt.
Aunque aún no hay fecha de estreno confirmada fuera de festivales, el debut en Annecy marca un paso clave para una película que lleva más de una década en producción.

Animal Farm: Un clásico reinterpretado para nuevos públicos
La adaptación de Animal Farm por parte de Serkis opta por alejarse del enfoque tradicional. En vez de resaltar los componentes políticos explícitos –presentes desde el origen mismo del texto– la película se define como una fábula emocional, con especial énfasis en los vínculos entre personajes. En palabras del propio director, el tono buscado es familiar, evitando una lectura literal sobre la Revolución Rusa o el estalinismo, aunque las referencias sigan presentes como trasfondo narrativo.
El primer adelanto mostrado al público muestra a Napoleón intentando formar una relación paternal con Lucky, un personaje joven interpretado por Matarazzo. En una escena que expone el enfoque del film, Culkin –en el rol de Squealer– intenta intervenir en ese momento, recibiendo como respuesta una advertencia directa de Rogen: “Estamos teniendo un momento padre-hijo”. La escena sintetiza el tono del proyecto: menos sátira política y más exploración de dinámicas afectivas bajo un contexto de poder.
El desplazamiento del eje político hacia una narrativa más emocional no es nuevo en adaptaciones contemporáneas. Responde a una tendencia actual en el cine animado por conectar con públicos amplios sin recurrir al subtexto ideológico explícito. En este caso, Serkis parece buscar un punto medio: mantener la estructura alegórica sin forzar lecturas directas ni contemporáneas.
Animal Farm: Producción, elenco y una larga historia de desarrollo
La versión animada de Animal Farm fue anunciada por primera vez en 2011. Andy Serkis, conocido por su trabajo como actor de captura de movimiento y director de proyectos como Mowgli, impulsó la idea como parte de su interés por los relatos simbólicos con anclaje emocional. En 2018, Netflix adquirió los derechos de distribución, pero finalmente decidió no continuar con el proyecto.
Producida por Jonathan Cavendish, Adam y Peter Nagle, Dave Rosenbaum y el propio Serkis, la película logró mantenerse activa a lo largo de los años a pesar de las múltiples reestructuraciones del mercado del streaming. El interés de Serkis en el texto de Orwell nunca se basó en su lectura política directa, sino en su capacidad de construir arquetipos a partir de una estructura narrativa simple. Su intención fue siempre convertirla en una historia accesible sin perder densidad simbólica.
La elección del elenco también refuerza esa dirección. Voces como las de Glenn Close, Woody Harrelson o Steve Buscemi suman capital simbólico a una producción que aspira a trascender las etiquetas de “adaptación infantil” o “versión simplificada”. En un mercado saturado de remakes, IPs y relecturas, esta Animal Farm parece querer posicionarse como una pieza autónoma dentro del circuito de cine animado, sin necesidad de ser comparada con su referente literario en términos ideológicos.
A la espera de su recepción en en el Festival de Annecy, la nueva Animal Farm de Andy Serkis se presenta como un caso de estudio sobre cómo adaptar un clásico político para un público familiar, en un contexto donde las fábulas vuelven a ocupar un lugar central en la narrativa animada contemporánea.
Mirá el tráiler a continuación:
 
				 
								


